A LAS PUERTAS DE LA GLORIA


            El tiempo pasa inexorablemente y borra progresivamente lo vivido por cada individuo, aunque existen algunos momentos, asociados a fuertes sensaciones, que son prácticamente imborrables, contra los que el paso del tiempo tiene poco que hacer. Uno de esos momentos sucedió el pasado sábado por la tarde en San Juan de Terreros, Pulpí, Almería, donde se celebro la Copa del Rey de Triatlón. Los 6 integrantes del Tritalavera llegábamos con ilusión inusitada y motivación desbordante, y un ambiente de equipo ideal para este tipo de competición, que se disputa en modalidad contrarreloj por equipos...



Así deberíamos haber salido, pero un oficial de "polo rojo" nos lo prohibió a escasos segundos de la salida.

            El desarrollo de la competición fue muy similar al planteamiento inicial. Una modesta natación (nos prohibieron usar el “traje-trampa” a 20” de la salida), un segmento ciclista muy conjuntados, con relevos cortos, y aportando todos en función de sus posibilidades llegando 5 integrantes a la t2, y una carrera dando todo lo que teníamos los cuatro que mejor estuvieran. Incomprensiblemente, la FETRI todavía no ha publicado clasificaciones por parciales (ni las va a sacar), así que nos quedamos con las ganas de hacer una análisis comparativo con los demás equipos.
            El puesto: 12º. Sabor agridulce. Agrio porque nos quedamos a 4 míseros segundos del top10. Por otro lado, dulce no, dulcísimo, porque realizamos una competición excelente para nuestras posibilidades como club modesto de una ciudad mediana, sin fichajes, sin estrellas, sin Blumistas, sin patrocinios, sin ayudas institucionales, simplemente 6 amigos que se ven casi todos los días en la piscina, con la bici o en los caminos y parques que rodean Talavera, cuatro de ellos, treintañeros con la ilusión de juveniles.

Orihuela 2011, aunque bien podría ser una foto
 de la llegada del sábado
            Pero no es la única sensación que facilitará el recuerdo a largo plazo de este momento. El sufrimiento. De largo, ha sido la carrera donde más he sufrido, más incluso que en el CE LD 2011. A partir del kilómetro dos de carrera, buena parte de la misma tuve que ser empujado para mantener el ritmo de mis compañeros. Cuando corres individualmente, no pasa nada por bajar el pistón, “¿Qué más da quedar el 13 o el 15?”, pero cuando estás en una competición por equipos de este tipo, en el que tu ritmo influye a todos, y que además, te van empujando, entregas hasta la última molécula de ATP de la que tu cuerpo puede disponer. Y así fue.

2 comentarios:

  1. Sentirse orgulloso de vosotros es poco. Veo vuestra ilusión, empuje , coraje , orgullo... y me veo compitiendo en ese mismo escenario, en el Pulpí de 1998 y 1999, aquellos campeonatos de España en los que fui bronce y plata respectivamente...muchos años ya, pero ilusión reencarnada en vosotros. Gracias.

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  2. que grandes sois los del talavera!
    enhorabuena para vosotros, una pena lo del traje,si no un top 10 pero el año que viene...es factible
    achuchones!

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